jueves, 21 de julio de 2016

Con coraza ya puedo caminar (poema)

Se rompe la coraza, los huesos contra la tundra,
Los ojos que no quieren ver más,
La paciencia amenaza,  la Luna insomne deslumbra,
pero el Sol nunca aquí brillara.

¿Hasta dónde?
¿Hasta cuando?
nada responde, aún está cantando,
las noches en tu cama ardiendo para siempre,
Ya por fin apagan las ganas de verte,
Descansa que demasiado te queda por hacer.

Tu casa siempre será la fragilidad al amanecer,
Camina lento que el tiempo es lo más relativo,
No te despidas que las heridas también son abrigo,
Se rompe la coraza , nadie esta aquí realmente.

Hoy simplemente respira que el sueño te abraza y dormido nadie miente,
Si la pesadilla es mentira,
se rompe la coraza el corazón tiembla en la tundra,
He tipo duro hasta cuando con las agallas desnudas, burlona la tristeza pregunta.

Que sé yo hija de puta, le respondo, para llorar no necesito más hombro que el del reloj ,
Vuelvo a tocar fondo pero el dolor como todo, también pasa veloz,
La coraza vuelve a estar lista,
Para que resista su sistema terrorista unos milenios más,
Recién construida nada duele, ni el absurdo insultante de la tele,
Ni estos arrugados papeles cuando te vas,
La tundra sigue allí disfrazada de ciudad pero con el corazón a cubierto puedo caminar.

jueves, 18 de febrero de 2016

Se suicidó (poema)



Descanse en paz la noche,
Siempre en pie de guerra,
Arrodillada ante la calma,
Eterna aquí o donde sea,

Se suicidó la noche ante mí,
No pude convencerla de que por la mañana nos iríamos a dormir juntos,
He de confesar que no solía llevarla por sitios muy románticos,
Hasta que la abría en canal sobre el folio soñador idealista,
Que jamás pude imaginar ni en el más sentido de mis amaneceres,



Se suicidó mi queridísima noche,
Cosa que hace aún más desgarrador su grito a mi esperanza insurgente,
Suplicándole que jamás le deje caer para siempre,

Se suicidó, está muerta,
Yo solo quisiera ser la ouija en tus labios,
Por si volviera a dar señales,
Por si me revelara el mapa del más allá,
La sicofonías que practique dieron resultados,
Y me dicto canciones como para hacer sentir,
Hasta el más frio hijo de puta,
Yo quisiera ser la ouija en tu cabello,
Por si apareciera su espectro,
Enredarla en este y no dejarla escapar jamás.

lunes, 15 de febrero de 2016

La misma eternidad (poema)



Sale arenilla de mí meado,
Y no sé si es de mis riñones hechos polvo
O de este desierto existencial
Un día estallara mi pecho
Y con sus pedazos podrás construirte un espantapájaros
Que asuste a los cuervos que picotean de tu suculenta soledad
Dicen que me voy a volver loco
Todo el día con los cascos puestos
Y me ahorrado los comentarios
Para otra vida dónde tenga fuerzas
Para explicar tantas cosas
La realidad es un grave insulto
Y me quedo sin defensas
Desnudo ante la inmensidad
Escuchando las burlas del camino
Fiel a la sinestesia desbocada
Sigo roto como ayer
 Inestable como las promesa que me siempre me hicieron
Nostálgico hasta de pasados que ni siquiera lo merecen 
Sé dónde voy pero estoy perdido
No quiero estallar aun
Los átomos parecen antidisturbios
Y hasta el aire me duele
Quisiera que me dieras tu aliento La Misma Eternidad que me está asfixiando ahora.

Lejos de ti (poema)




Supongo que algún día

yo estaré muerto y tú viva,

e igual cuando te enteres,

estarás dando de comer a tus hijos

con otro hombre.


En un momento todas nuestras noches

golpearan los cristales de tu casa,

y tal vez te atrevas a volver a leer

los poemas que hace mucho te escribí,

cuando aún no te había rendido.


En otro momento

la realidad no se dejará engañar,

y entonces sabrás

que nadie te sintió como yo.

Pero ya estaré muerto,

aunque muy a lo lejos

resuene el eco de todos los momentos

en que escondido en tus brazos

me sentí eterno

como si nunca fuera a morir

lejos de ti.

La redundancia del misterio (poema)

Observo el firmamento y sé que las estrellas están ahí
pese a la contaminación lumínica,
sé que la oscuridad nos observa,

sabiendo que va a ganar la partida,
hagamos lo que hagamos,
me acuerdo de gente a la que conocí
y que ya no volveré a ver nunca más,
repaso todos los lugares donde sentí la misma sensación,
lo efímero de una existencia que realmente ni sabe por qué existe y tal vez si lo supiera sería aún peor,
observo el firmamento y me siento lejos de todo,
pero no me gusta,
ya pasare una eternidad obligado a ser pasajero de un viaje hacia ningún lugar,
el vértigo me carga el pecho y la sala de espera no tiene mucho que ofrecer,
ahora sí que añoro una respuesta,
hoy aunque durmiera abrazado a todas las mujeres del planeta, seguiría sintiéndome solo.
Solo en el misterio del camino hacia la muerte misteriosa